Voley: el sabor agridulce de no completar la competencia debido a la pandemia

Por Lucía Alexander

Como toda actividad no esencial, el vóley se vio afectado al avance del COVID19, y no se pudo completar el Torneo Argentino de Clubes, en el cual el conjunto masculino de Vélez Sarsfield había tenido gran progresión en su juego.

El torneo había comenzado con una derrota 3-2 ante Paracao, pero el entrenador Rodrigo Pérez destacó como positivo el buen juego pese a las altas temperaturas de Entre Ríos en enero. Este último ítem hizo que se dificulte el objetivo que el equipo tenía preparado. Al siguiente fin de semana, Vélez fue local y revirtió la situación, al superar 3-2 a San Lorenzo en un partido apasionante que mantuvo al público con expectativa hasta el final. 

Los jugadores fortineros fueron aprendiendo de sus errores, corrigiendo las cosas partido a partido, ya sean situaciones globales y grupales, o dificultades técnicas personales de cada jugador. Esto se vio reflejado en las dos fechas siguientes, en las cuales el conjunto de la V azulada superó 3-2 a Once Unidos y 3-0 al seleccionado argentino. 

Posteriormente, los jugadores se relajaron, y fue entonces cuando llegó una dura caída para el conjunto velezano nuevamente en manos de Paracao; en tres sets corridos el conjunto entrerriano despachó al del Liniers. Aunque a la semana siguiente, tras el duro golpe anímico, los chicos de Vélez cambiaron de cara y volvieron a derrotar a la Selección Argentina Juvenil, esta vez 3-2. 

Pese a lo mencionado anteriormente, y creyendo que el equipo había podido restablecer su chip de la confianza, llegando al cierre de la primera fase, los dirigidos por Rodrigo Pérez tuvieron dos partidos muy bajos en cuanto a su rendimiento. Los encuentros se disputaron con un día de diferencia, sin poder analizar bien las falencias que se arrastraban; el viernes 21 de febrero cayeron 3-0 ante Once Unidos, y el domingo 23, fueron derrotados 3-1 ante San Lorenzo. 

“Fuimos de menor a mayor, yo estaba nervioso al principio, porque estaba teniendo un rol muy protagónico siendo el armador titular, tenía una responsabilidad muy grande”, admitió el jugador Gianluca Bravetti. “Tuvimos momentos de muy buen vóley, sabíamos que estábamos para una semifinal o el ascenso”, concluyó lamentándose por no poder completarlo.

Todo lo trabajado en esas fechas sirvió de experiencia y como prueba para la segunda fase, que tenía todas las expectativas por parte del entorno, ya que según admitió Rodrigo Pérez, “es la parte más linda” y se habían preparado durante mucho tiempo para poder disputar esos partidos. Pero Vélez solo pudo completar dos encuentros de los estipulados; en el primero derrotó a Regatas de Corrientes con un contundente 3-0, y después cayó por 3 a 0 ante UVT en San Juan, en su última presentación en el triangular de la segunda fase del Torneo Argentino de Voley Masculino. Pero pese a la derrota, ya se había obtenido el pase a los cuartos de final.

La realidad es que como todas las actividades en el resto del mundo, el Torneo Argentino de Clubes 2020 se vio claramente afectado debido a la llegada del coronavirus al suelo argentino. Entonces, se emitió un comunicado, en el que se especificó que la continuidad de la competencia quedaba supeditada a las restricciones del Gobierno Nacional por la pandemia del COVID-19 con plazo hasta el 1° de abril, y por supuesto, con el correr de los días y entendiendo la mortalidad de la enfermedad y la gravedad de la situación, la Federación de Vóleibol Argentino tomó la acertada decisión de dar por finalizada la competencia.  

En relación a esto, el entrenador de Vélez Sarsfield dio su punto de vista, e hizo un balance de lo logrado. “Estamos contentos porque habíamos clasificado a cuartos de final, pero el sabor obviamente es agridulce, porque vos te preparas para la competencia, llegás al momento más lindo que son las instancias finales y cuando lo estás saboreando, te lo sacan de la boca”, admitió Rodrigo Pérez.