"Relatar a Vélez fue mi máximo sueño"

Por Carolina Sorbello y Ezequiel Martinez 

El periodista deportivo y contador público, Roberto Sileo, contó su trayectoria como relator partidario del club de sus amores. Realizó las transmisiones para Súper Vélez por AM 810 durante diez años consecutivos y actualmente se encuentra colaborando desde la Comisión Directiva del club.

- ¿Qué te inspiró a querer ser relator?

-Desde chico lo tenía como un hobbie, practicaba permanentemente con un micrófono inventado o lo que sea, o mismo con un grabador mirándome al espejo.

-¿Cómo fueron tus comienzos relatando?

-Empecé en el año 1991 en Radio Colonia, haciendo fútbol de ascenso y después me enganché un poco con lo que era Vélez. En esa época estaba como técnico Eduardo Manera. Vélez peleó ese campeonato hasta lo último. Estuvo ahí pegado a un punto, pero no se dio por una derrota frente a Racing en la penúltima fecha. Después estuve permanentemente en Colonia haciendo la campaña de Argentino de Quilmes en la Primera C y también Defensa y Justicia, en la D. En el año 2007 a partir de noviembre empecé con el equipo periodístico en Súper Vélez con unos chicos conocidos, colegas y mis hijos. Desde allí empezó unas de las épocas más gloriosas para el club ya que ganamos varios campeonatos.

-¿Cómo fueron tus comienzos relatando las campañas de Vélez?

-Comencé en una pretemporada, en un partido amistoso que jugaban Vélez y Lanús en Mar del Plata. Nunca había relatado, me ofrecieron ir y transmitirlo. Este partido se jugó en el predio de Kimberley. Fue comiquísimo porque jugaban con pecheras y uno estaba sin reconocer a los jugadores y en ese predio estuvimos trasmitiendo desde unas escaleras de madera. En ese momento el entrenador era Manera y paraba el partido cada dos minutos para realizar una jugada preparada. Fue unas de las peores transmisiones que hice por el hecho que uno necesita ritmo y era imposible porque se paraba mucho.

-¿Tenés algún consejo para darle a los estudiantes de Periodismo?

-Yo hice Periodismo en la Escuela de los Dos Congresos y nunca pensé poder estar en una transmisión con un micrófono. La verdad que uno lo tiene como un hobby y con el tiempo se va profesionalizando más. Con la transmisión se va tomando el gustito y lo último que esperás es que alguna vez llegue el partido en el que hacés tu primera cobertura. Tenés que tener estudiado los equipos. En mi caso, que era una transmisión partidaria, es como que te sabés de memoria los nombres de los jugadores, suplentes y también de los pibes de las inferiores. Hay que tener en cuenta mucho al rival, siempre para no cometer errores en sus nombres, apodos y también hay que estar atentos si tienen algún detalle especial, ya sea muñequera, pantalón diferente o vincha; esto es para poder ubicarlos porque desde la cabina estamos a una altura y a veces cuesta reconocer los números de las camisetas.

-¿Tenés algún partido recordado por algún hecho emotivo o un incidente?

-Dos. Uno es en Santa Fe en el año 2009: un partido de Colón-Vélez. En ese momento Colón venía disputado el campeonato con Vélez. En el primer tiempo, ellos ganaban 2 a 0 y las cabinas en la cancha estaban metidas dentro de las plateas, y la gente no tenía espacio con la cabina por ende los hinchas estaban apoyados. Se dieron cuenta que era una transmisión partidaria y así comenzaron los insultos. El partido se dio vuelta y Vélez ganó 4 a 2. En ese momento era la parte final de campeonato de la época del Tigre Gareca y no la pasamos bien en esa cancha. Es más, tuvo que venir la policía. Otro recuerdo más lindo es el que tengo en el año 2009 el partido con Huracán, qué pasó de todo. Justo en Argentina estaba la Gripe A y aparentemente lo iban a suspender, pero se jugó igual con lluvia, piedras y también se paró el partido por un rato. En lo último que quedaba, con menos 7 minutos Vélez terminó logrando el triunfo y fue el gol más loco que grité en mi vida, me olvidé que tenía al micrófono y me salió el fanatismo.

-¿Tuviste algún referente en el relato?

-En el relato uno siempre se guiaba. Yo siempre miraba mucha televisión cuando relataba Marcelo Araujo, y lo que era la transmisión de fútbol por radio, Víctor Hugo Morales es el número uno en esto. Más atrás, cuando yo era más chico escuchaba mucho lo que era José María Muñoz. Eso fue lo que más escuchaba, pero Víctor Hugo es único. Más adelante empezó Mariano Closs y también es muy bueno.

-¿Como encontraste tu estilo o forma de relatar?

-Uno no lo que tiene que tratar es no cambiar tu forma de hablar a pesar de tenes que meterle ritmo, así es en la radio, es más rápido, ágil, tenes que inventar mucho, jugar con el locutor, totalmente diferente a la televisión.

-¿Cómo te preparabas antes de cada partido?

-Preparándome desde el día anterior, cuidándome la garganta, descansado. Hay que ir bien dormido y vocalizar antes del partido, calentar la garganta, pero sobre todo darle para adelante y no tener miedo.

-¿Qué significo para vos relatar Vélez?

-Era un hobby que tenía de chico y cuando se me dio en Vélez fue el sueño máximo, sobre todo, como les dije, relatar desde el 2007. Lo hice por última vez en 2017 por las elecciones de Vélez, debido a que empecé a participar en política. Ahora hago otras tareas en las políticas del club, pero relatar es hermoso, te da una adrenalina única y más en la época que Vélez ganaba campeonato tras campeonato.

-¿Te quedó algo pendiente en tu carrera como relator?

-Como estoy en la comisión directiva ahora, ya que estoy en el orden de fiscalización, dejé un tiempo suspendido esto del relato. Me gustaría volver hacerlo, relatar campeonatos, Libertadores... Todos los que relatamos a Vélez somos fanáticos. Los partidarios están acá, ponen el corazón, el lomo, la espalda y el sentimiento lo hace volver loco a uno. Y si se da de volver a trasmitir otra vez, bienvenida sea esa posibilidad.

-¿Con qué equipo de Vélez tenés el mejor recuerdo?

-De los partidos que relaté, la final de 2009 con Huracán, fue el partido soñado. El gol más loco que relaté y en el que expresé todo mi fanatismo. Lo hice más como hincha que como relator.

-¿Qué significa para vos compartir la profesión con tu hijo?

-Es algo soñado, el más grande está conmigo en producción y mi otro hijo, Agustín, que hoy en día está encaminado en lo que es el periodismo de Vélez, hace vestuario. Tenerlo al lado era como un sueño, por eso quiero volver hacer la transmisión y seguir teniéndolo como comentarista o en el vestuario.

-¿Con quién te hubiese gustado hacer dupla periodística?

-Me gusta mucho Ariel Senosain y también Gustavo López, de Radio La Red. Son lo que más me agradan. Y si uno va al maestro de los comentarios, creo que Macaya Márquez hubiese sido el comentarista soñado para todos los relatores.